La motivación es uno de los puntos más importantes cuando se busca cualquier tipo de objetivo ya sea profesional o en nuestro estilo de vida saludable, sin embargo, mantenerse comprometido y constante con una rutina de ejercicios puede llegar a ser todo un desafío.
Conoce aquí de los secretos y tipos de cómo puedes motivarte a ti mismo para alcanzar tus metas de salud y fitness. ¿Qué es lo que te motiva a levantarte cada día para hacer ejercicio?.
Conocer el porque
Antes de iniciar con cualquier tipo de ejercicio o rutina de ejercicio es importante reflexionar sobre el por que hacemos las cosas y que nos llevó a tomar la decisión de tomar un cambio, ya sea para mejorar la salud física, mental o simplemente para tener un momento de relajación y desconexión, tener en mente el por que te dará un propósito a un mas grande que ayudará a mantenerte enfocado en todo momento.
Establece metas realistas y a tu alcance
Es importante que las metas y objetivos que te plantees sean claros y realistas para poder mantener la motivación en todo momento a largo plazo. Una técnica muy útil es dividir tus objetivos grandes en pequeños objetivos más sencillos y alcanzables. Recuerda celebrar cada logro y objetivo que alcances.
Descubre lo que te apasiona
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Trata de elegir deportes o actividades físicas que te gusten practicar, como correr, bailar, nadar, practicar yoga o dar caminatas por un parque, encontrar una actividad que te apasione hará que tu proceso de compromiso con la rutina de ejercicio sea mucho más fácil.
Busca ayuda y compañía
Tener una meta u objetivos con amigos o familiares puede ser una gran fuente de motivación para ti, tener un compañero de ejercicio no solo hará que te sientas más comprometido si no que obtendrán motivación mutuamente. Intenta encontrar algún gusto en común con un familiar, compañero o amigo.
Piensa en tu éxito a futuro
Puedes cerrar los ojos e imaginar cómo quisieras sentirte o verte cuando finalmente cumplas tus objetivos delimitados. Es importante que mantengas esas sensaciones e imágenes en tu mente cuando tengas poca motivación, pero recuerda en todo momento disfrutar el proceso.
Quiérete y se amable contigo mismo
Es importante que sepas que todos tienen días difíciles y es de lo más normal tener altibajos al momento de querer alcanzar una meta. No debes dejar tus metas a un lado por un mal día, más bien debes ser amable contigo mismo y entender que posiblemente necesitas una pausa o un descanso.
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