Ser feliz puede ser un concepto muy distinto para cada persona. A veces, es una emoción, otras veces son cosas materiales y en muchos casos son las personas que amamos.
Un término muy común relacionado a la felicidad es el "bienestar", que involucra tanto el bienestar físico, como el mental y el emocional.
Sentirte bien por dentro y hacia afuera implica esa triada que es imprescindible para estar en paz. Pero, sin duda una de las más difíciles de cuidar es la mente y en ocasiones actúa en nuestra contra.
El trabajo es individual y se basa en experiencias y aprendizajes propios, pero hay algunos consejos que nos gustaría compartirte para comenzar a entrenar a tu mente y que actúe a tu favor y no en tu contra.
Evita las comparaciones y deja de criticarte
Nunca conoceremos el camino de la otra persona a detalle, quizá haya tenido que hacer algo de lo que se arrepiente y que no vemos. Todos somos diferentes.
Compararte sólo te provocará insatisfacción. Además, recuerda muy bien esto, las comparaciones no son justas. Solemos comparar logros ajenos con fracasos propios. Entonces, lo mejor sería comparar logros con logros, pero... ¿quién realmente lo hace?
Agradece todos los días
Agradece tu vida, tu camino, tus aciertos, tus tropiezos, el hogar en el que vives, las personas que tienes a tu alrededor. Agradecer es empezar a valorar y esa sensación de plenitud se traduce en todos los ámbitos.
Hazte responsable
Esto significa en que dejes de culpar a otros por lo que te pasa. Deja de ser víctima de las circunstancias y comienza a perdonarte a ti y a los demás. Vivirás más feliz si te haces responsable, eso es ser libre.
No permitas que tus emociones te controlen
¡Está bien sentirlas! Pero recuerda, la emoción dura algunos segundos, cuando la pasamos a la mente y le damos una clasificación entre buena y mala, viene la culpa, el miedo, la vergüenza y muchas veces dejamos que eso controle nuestra vida.
Siente cada emoción, vívela, pero déjala ir y elige otro pensamiento, el que te haga sentir paz, ese el indicado.
Deja atrás al pasado y no vivas en el futuro
Pensar en el pasado te mantendrá en culpa y en depresión. Pensar demasiado en el futuro te creará frustración y ansiedad. No puedes cambiar lo que pasó, tampoco controlar lo que pasará, pero eres absolutamente poderoso en este presente. Elige con sabiduría.
Fluye y acepta
Fluir y aceptar las situaciones que se te presenten no significa que las apruebes. Hay condiciones que no puedes cambiar, que no están en tus manos, pero lo que tú elijas y tu perspectiva sí lo está. Acepta y fluye lo que no puedas cambiar y cambia con amor lo que sí.
Utiliza a las cosas materiales, no dejes que ellas te utilicen
El comprar o adquirir algo nuevo puede provocar una sensación de felicidad repentina, que queremos emular tanto como podamos. Pero es tan fugaz que en cuanto llega, desaparece, así estamos trabajando constantemente para volver a sentir lo que sentimos.
¿Y si trabajas en algo más permanente para ser feliz? Un ejemplo sería admirar lo que está a tu alrededor con agradecimiento, charlar con compasión con las personas, reírte a carcajadas y comer algo delicioso.
Deja de convivir con personas con las que te sientes mal
No se trata de rechazarlas, excluirlas o señalarlas. Muchas veces encontramos personas tóxicas porque es la combinación que tienen con nosotros mismos, quizá una persona sea tóxica contigo, pero sea la persona "vitamina" de otra.
Se trata de aprender a distinguir con quién te sientes mejor y no sentirte "obligado" a estar con quien no, por el qué dirán, por presiones familiares o laborales. Y recuerda que "lo cortés no quita lo valiente."
Empieza hoy y deja de procrastinar
No te preocupes, el postergar proyectos es algo que le pasa a todas las personas en mayor o menor medida, pero un consejo para comenzar a entrenar a tu mente es darte cuenta por qué lo haces.
No es porque no tengas las herramientas, lo que estás tratando de evitar es la emoción o recuerdo que te provoca. Encuéntralo, aunque te cueste trabajo y enfréntalo, sólo así dejarás de postergar todo lo que deseas y podrás sentirte más feliz.
Mentir y manipular
Quizá podrás conseguir en un principio lo que deseas, pero todo lo que venga de la mentira, la manipulación y el desamor, con el tiempo cobra factura. Volverá la culpa, la indignación, el miedo y harás todo lo posible por seguir tapándolo, quizá con más mentiras.
Terminarás en una montaña de "basura emocional" que te costará mucho trabajo limpiar en un futuro.
Cambia tus pensamientos negativos
Elige, siempre tienes la opción de elegir qué pensamiento puede traerte mayor paz. El termómetro es ese, si te genera ansiedad, miedo, culpa, vergüenza, ese no es el camino. Si por el contrario sientes bienestar, paz y agradecimiento, ese es el pensamiento que debes seguir.
Un día a la vez
Lidiar con la mente es un trabajo diario, no quiere decir que si hoy lo hiciste muy bien, mañana ya esté resuelto. Todos los días hay elecciones que tomar, todos los días tú puedes elegir qué camino tomar.
Si eliges el que no te da paz, tampoco te castigues, fluye, acéptate, perdónate y continúa tu camino. El trayecto de la vida no es una autopista constante, habrá tramos en los que quizá haya demasiados baches y ningún señalamiento.
¡Tú puedes! Si lo crees, podrás lograrlo.
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