El lenguaje corporal también comunica, lo mejor es ser honesto con lo que piensas, dices y haces, pero en ocasiones hay emociones y pensamientos que tu mente todavía no procesa, pero tu cuerpo las manifiesta enseguida.
Así que es momento de observarte para comprender cómo te sientes, pero también para evitar ciertos errores, sobre todo si deseas lograr algo como entablar una relación de pareja, de amistad, conseguir un trabajo, llevarte mejor con tus compañeros de oficina, en fin.
Estos son los errores que deberías evitar en tu lenguaje corporal. Obsérvate y cuídate.
Evitar contacto visual
Es muy importante no bajar la mirada o evitar ese contacto visual, lo que denotas es inseguridad o incomodidad con la persona con la que estás. Tampoco se trata que no le quites la mirada, obsérvala a los ojos cuando hablen de forma natural y no forzada.
Mala postura
Caminar encorvado, inclinarte de más en una silla, sentarse en una posición incómoda, todo eso habla de ti. Puedes parecer débil e inseguro o por el contrario demasiado desinteresado en los demás.
Dar la mano sin seguridad
Dar el apretón de manos demasiado fuerte o demasiado débil, casi tocando, puede denotar o ego o debilidad, tómalo en cuenta y saluda con firmeza, pero no en exceso, esto también es parte de tu lenguaje corporal.
Cruzar los brazos
Es una pésima posición corporal, ya que denota incomodidad, inseguridad y que te estás cerrando a lo que la otra persona te dice. Procura evitar hacerlo sobre todo si buscas lograr algo en alguna conversación.
Mirar al piso
Denota total inseguridad y aislamiento hacia el mundo. Mira de frente, aunque estés perdido en tus pensamientos, eso no tiene nada de malo, pero procura mirar el mundo que te rodea y admírate de lo que tienes a tu alrededor.
Tocarse constantemente
Ya sea el cabello, la nariz o la frente, denota incomodidad e inseguridad. Es cierto que estos movimientos son involuntarios y muchas veces también un tic de la persona, pero evaluarlos y entender la razón de fondo por la que los haces, te ayudará también a evitarlos.
Invadir el espacio de alguien más
Respeta el espacio de los demás, no te acerques demasiado, en lugar de acercar a una persona, puedes lograr el efecto contrario, así que cuida tu lenguaje corporal.
Gesticulación exagerada
Controla tus movimientos de manos y brazos, puedes dar la impresión de ansiedad, desconfianza y sobre todo nerviosismo.
No reflejar a los demás
Hay personas que lo hacen de forma natural, cuando alguien nos cae bien tendemos a imitar sus gestos, pero también lo puedes hacer de forma consciente con asentir o demostrar comprensión o entendimiento con lo que la otra persona está diciendo.
No sonreír
Una leve sonrisa puede ser la clave para lograr lo que te propongas, en cambio la ausencia de ello podría parecer que no estás interesado o que te sientes incómodo con esa persona.
Jugar con algún objeto
Cuando hablas con alguien, muestra tu atención y no juegues con algún objeto, ya sea tu celular, tu reloj, bolígrafo o cualquier otro objeto que esté cercano.
Fruncir el ceño
Y no frunzas el ceño, esto denota incomodidad o molestia. Claro, si tienes una luz de frente o padeces mala visión, considéralo antes de hablar un tema importante o estar con alguien que realmente te interesa.
El mejor consejo es tener una sana autoestima y ser muy honesto con lo que dices, haces o piensas.
No te pierdas: Mejora tus relaciones personales utilizando el lenguaje corporal
Foto: IgorVetushko / Depositphotos.com