Imagen: Depositphotos/Daxiao_Productions
Para comenzar a liberar nuestras emociones estancadas, es necesario aceptar y asimilar que las cosas no resultaron como nosotros quisiéramos y que al no poder cambiarlas, debemos soltar para poder avanzar y continuar con nuestra vida.
Algunas personas, cosas materiales, circunstancias, situaciones, en ocasiones terminan lastimando y perturbando nuestro ser.
Cualquier situación caótica, emocional, nos brinda la oportunidad de estar más en contacto con nosotros mismos, para después hacerle caso a nuestra intuición, al susurro de nuestro corazón.
En ocasiones, no sólo nos aferramos, a personas, cosas o incluso situaciones, sino que también nos quedamos enganchados con nuestros pensamientos, nuestras emociones se quedan estancadas y no permitimos que sean liberadas y sanadas.
Liberar sentimientos estancados, nos permite construir una nueva historia, dejando de lado todo aquello que perturba nuestra estabilidad emocional y ocasiona desgaste físico a nuestra persona.
Cuando te atreves a soltar y liberar emociones y sentimientos estancados, existe la oportunidad de construir una nueva historia de tu vida.
Sí nos atrevemos a soltar, las cosas empiezan a mejorar, comenzamos a valorar más nuestros tiempos, y por lo tanto también a cada persona o situación, le damos su lugar y espacio.
Al soltar, emociones, sentimientos, personas, que nos tenían enganchadas, los miedos e inseguridades poco a poco comienzan a desaparecer, la incertidumbre y la ansiedad ya no dominan nuestra vida.
En un principio puede ser que te sientas en el limbo, que no tienes rumbo, pero te aseguro que lo viene siempre, será mejor a lo que perdiste o dejaste ir.
Acepta el dolor, el sufrimiento de tus emociones y sentimientos para que puedas liberar y avanzar, no te paralices, mejor ocúpate de ti, ámate para que puedas compartir, lo que llevas dentro de ti a los demás.
El dolor es pasajero, nos ayuda a fortalecer y crecer. Conocerte a ti mismo es lo mejor que te puede pasar en la vida.
Permítete hacer cambios en tu vida, deja entrar nuevas personas, suelta lo que no te permite avanzar y confía.
Si nos atrevemos a soltar lo que nos pesa, amar todo aquello que tenemos y ser agradecidos con lo que hemos experimentado, lograremos encontrar paz y tranquilidad en nuestro corazón.