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Chris Gardner, el hombre detrás de la cinta “En busca de la felicidad”

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“Jamás permitas que te digan que no puedes hacer algo, tampoco yo. Si tiene un sueño, tienes que perseguirlo”. Esta es una de las frases más recordadas de la película “En Busca de la Felicidad”, protagonizada por Will Smith y su hijo, Jaden Smith. Si bien la película trata de la dura vida que tuvo Chris Gardner (a quien vamos a conocer más al fondo), el largometraje tiene 2 mensajes muy lindos que vale la pena resaltar. ¡ALERTA DE SPOILERS!

¿Quién es Chris Gardner?

 

Chris Gardner es un exitoso empresario, escritor, conferencista y filántropo estadounidense, autor del libro “The Pursuit of Happyness”. Tuvo una infancia muy desafortunada marcada por el abandono de su progenitor, el abuso de su padrastro, la violación en un centro de acogida para menores y la falta de dinero. Con el sueño frustrado de estudiar medicina, Garner dedico parte de su juventud a la venta de suministros médicos de lujo, los cuales pocos consultorios podían pagarlos.

Por los años 1980, Chris estaba en crisis, se separó de su primera esposa con la que tuvo a su primer hijo, estaba en bancarrota y estuvo un tiempo en prisión por no poder pagar sus infracciones de tránsito, hasta que una tarde de 1981, el hoy escritor se encontró y habló con un agente de bolsa que manejaba un Ferrari rojo, lo cual le sirvió como inspiración para darle un giro a su vida laboral.

Comienzo de la trama

Cabe mencionar que la película protagonizada por Will Smith en 2006, nos muestra la parte más inspiradora e importante de la vida del empresario; podemos observar todo lo que tuvo que pasar el personaje para llegar a su meta.

Para ese entonces su esposa había decidido dejarlo. Él entendió que si quería darle una vida mejor a su hijo se la tenía que jugar y aceptar la invitación que le hicieron para competir por lugar en una agencia de corredores (cada 6 meses seleccionaban a una persona para trabajar con ellos), mientras trataba de vender sus máquinas de rayos X para poder sobrevivir.

El principio era poco alentador, se mudó a un motel para economizar y en la agencia no había vendido nada en más de un mes. Poco a poco fue conociendo gente que le ayudó a afianzarse a ese mundo y todo parecía equilibrarse, hasta que su status económico hizo que todo se complicará considerablemente. Lo echaron del cuarto donde vivía por falta de pago, lo cual provocó que él y su hijo de 6 años durmieran en la calle por algún tiempo. Durmieron en albergues, autobuses e incluso en los baños del metro (una de las escenas más tristes e icónicas de la película).

A pesar de que estaba pasando el peor momento de su vida, Chris nunca se dejó caer. Le escondió al mundo la difícil situación que atravesaba, siguió llegando temprano a la oficina para trabajar muy duro con el fin de lograr el objetivo, y continuó siendo el gran padre que su hijo necesitaba.

¡ESTA PEQUEÑA PARTE DE MI VIDA SE LLAMA, FELICIDAD!

El filósofo alemán, Friedrich Nietzsche, dijo una vez: "Aquel que tiene un porqué para vivir se puede enfrentar a todos los cómos". Chris sabía muy bien cuál era su objetivo, tenía un porqué seguir adelante y, a pesar de todo lo malo que paso, incluyendo el conflicto que tenía de no poder asegurarle ni siquiera un techo a su hijo, fue perseverante y valiente, por eso cuando lo llamaron a la oficina principal para informarle que él era el elegido para forma parte de la empresa, sintió un gran alivio.

Las lágrimas en sus ojos reflejaban el orgullo que tenía por cumplir su meta, la frase “Esta pequeña parte de mi vida, se llama, felicidad”, es el símbolo de satisfacción que se siente cuando se logra un sueño o un propósito, y el abrazo a su hijo de la última escena de esa secuencia, significa el desahogó total de la tristeza y frustración que tenía al inicio de la película. Hay que remarcar que el sacrificio que tuvo por su hijo, es digno de admirar.

“Elegí abrazar el espíritu de mi mamá quien, a pesar de que ver negados, aplazados y destruidos a demasiados de sus propios sueños, me inculcó que podía soñar”, dijo en una entrevista con Oprah. Gardner no solamente demostró que tenemos que ser perseverantes para alcanzar nuestros anhelos, también que debemos de tener confianza en uno mismo para lograr dichos sueños. A las finales de eso se trata la vida, de seguir adelante a pesar de las adversidades que el mundo nos prepara y lo más importante, de conseguir la felicidad en cualquier ámbito de la vida.

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