Cambiar de hábitos alimenticios depende de nosotros, el amor propio es el principal ingrediente que debemos de agregar a nuestra lista de prioridades nutricionales.
Mide lo que es importante para ti, cuántas veces realizas tus hábitos, cuantos cigarros fumas, cuantas bebidas consumes, qué alimentos ingieres, de esa manera lo que arrojen los números te harán darte cuenta de los hábitos actuales que tienes.
El alimento es todo aquello con lo que nutres tu cuerpo, mente y espíritu.
¿De qué manera te alimentas?, ¿Qué tanto deporte prácticas, lees, caminas, meditas?
Cambiar de hábitos depende de nosotros, el amor propio es el principal ingrediente que debemos de agregar a nuestra lista de prioridades nutricionales.
Cuando estás consciente de lo que consumes, tanto en alimentos, como en pensamientos, decides que es lo que quieres incluir en el desarrollo espiritual, cuerpo, alimentación y emociones.
Poner en práctica la salud integral nos ayuda para intentar cambiar hábitos y poder gozar de un buen sistema inmunológico, prevenir las enfermedades, mantenernos vitales, llenos de energía que nos permita realizar nuestras actividades durante el día.
En la mayoría de los casos, nos alimentamos tan inconscientemente, no sabemos lo que deteriora nuestro organismo y que repercute en nuestra salud.
Muchos de los problemas de salud que tenemos actualmente se deben a una incorrecta alimentación. La salud es de responsabilidad de cada uno de nosotros, nuestras decisiones y hábitos que tenemos.
Creemos que una mala nutrición está relacionada por la falta de alimentos, por eso decidimos quitar, evitar, restringir algunas cosas de nuestra alimentación, sin embargo, más allá de comer mucho o poco, tenemos que aprender a comer de manera equilibrada.
Nuevas alternativas de alimentarnos, motivarnos, ser flexibles, encontrar nuestra forma de alimentarnos que nos funcione y la cual nos brinde beneficios tanto de salud como de bienestar emocional.
Es importante monitorear cómo nos sentimos durante y después de comer, es cuestión de conciencia y sabiduría. La ansiedad y la gula se pueden combatir con deporte, ejercicio físico o con una buena lectura, así como el silencio, meditación, oración, te calma mucho.
Comer más sano nos brinda energía, nos ayuda a despertarnos con mayor vitalidad, cambiar de hábitos nos sirve para romper con la monotonía y permitirle a nuestro cuerpo renovarse y limpiarse de todo lo que consumimos, es como darle un respiro.
Comer sano te nutre, gastas menos porque muchas veces dejas de consumir comida chatarra, ahorras.
La ansiedad y la gula se pueden combatir con deporte, ejercicio físico o con una buena lectura, así como el silencio, meditación, oración, te calma mucho.
Una persona cambia por dos razones, por inspiración o desesperación, sé el cambio que quieras ver en otros, primero en ti mismo: para promover la salud, la longevidad, la felicidad.
Fuente: Andy Cornejo
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