¿Sabías qué…? Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la dislexia afecta a aproximadamente el 10% de la población mundial.
La dislexia es un trastorno de origen neurobiológico que se caracteriza por tener dificultad de aprendizaje. Es decir, las personas que padecen dicha afección les cuesta reconocer palabras, leen de forma lenta e insegura y tienen escasa comprensión. Pero eso no se significa que no sean inteligentes, simplemente se pueden tardar un poco más en aprender.
Síntomas o rasgos de las personas disléxicas
Como ya se dijo, la principal característica de estas personas es la dificultad de aprendizaje en las actividades cognitivas lectoescritura. No obstante, también existen algunos rasgos a tomar en cuenta para poder detectar este trastorno, tales como:
- Dificultades en la lectura y escritura de manera fluida y precisa
- Dificultad de comprensión
- Léxico limitado
- Deficiencia en memoria de corto plazo
- Dificultades de seguimiento visual
- Dificultad en la noción del espacio-tiempo
- Confusión entre derecha e izquierda
- Reconocer los días de la semana, meses, horas
- Cambio en el orden de las letras
- Dificultades con las matemáticas
- Dificultades en la coordinación motriz
- Ortografía deficiente
¿Cómo podemos ayudar a estas personas?
Hay que tomar en cuenta que este trastorno no tiene cura, por lo que la evaluación e intervención temprana ayuda a mejorar el estilo de vida de las personas con dislexia. Cabe mencionar que los adultos también pueden ser diagnosticados con dicha afección.
Es necesario que al primer indicio que presente la persona, acuda a un especialista para que sea evaluada, le den un tratamiento a su medida y así puedan desarrollarse mejor.
En el día internacional de la dislexia, Iñaki Manero nos dará algunas recomendaciones y curiosidades sobre esta enfermedad