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LOS 8 TIPOS DE MAESTROS Y MAESTRAS QUE TODOS HEMOS TENIDO

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Angel Ponce
Angel Ponce
Licenciado en Ciencias de la Comunicación, entusiasta, cinéfilo, amante del rap mexicano y fiel aficionado al fútbol nacional e internacional, fotógrafo amateur de conciertos y entrevistador de talentos emergentes, así como de estrellas consolidadas.

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Todos en nuestra etapa estudiantil hemos tenido profesores muy sabios, inteligentes, buena onda y enojones, es por eso que nos dimos a la tarea de recordar a los diferentes tipos de maestros con este top.  

El trabajo de los docentes es uno de los más bellos del mundo, ya que son los encargados de educar a las jóvenes mentes, ellos prácticamente fueron o son como nuestros padres, ya que además de proporcionarnos los conocimientos necesarios para salir adelante en la vida, también nos aconsejan y nos apoyan.

¡Comencemos con nuestro top!

1. Los guapos.

Todos alguna vez tuvimos esa hermosa profesora que acaparaba las miradas y la atención de todos, pues ningún alma en el salón se atrevía a interrumpirla y automáticamente el grupo problema del colegio se convertía en el mejor de todos.

Esto también sucede con los profesores pues siempre había un maestro joven y guapo del cual todas las alumnas se volvían locas por él y hasta participaban en todas las clases con tal de conseguir un poquito de su atención.

2. El comediante.

Este tipo de profesor es sumamente peligroso, y si en tu vida estudiantil tuviste a ese típico maestro sabes muy bien de lo que hablo.

Corrías grave peligro si no te reías de sus chistes malos que contaba durante la clase y casi siempre intentaba estar “en onda”

3. El veterano.

Uno de los profesores con más trayectoria en el colegio este mítico maestro les dio clases a nuestros hermanos mayores y en algunos casos hasta nuestros papás.
En ocasiones se les iba la onda y perdían el sentido de la clase a tal grado de que terminaban hablando de un tema completamente irrelevante y que no tenía nada que ver con la clase.

4. El estricto.

Todos los alumnos le temían y le rogaban a todos los santos para que no les tocara este típico maestro, pues casi siempre su materia era la más complicada de pasar, ya que el grado de exigencia era criminal y por lo regular siempre dejaba tareas interminables.

¡Incluso se dice que disfrutaba hacer sufrir a sus alumnos a tal grado que eran conocidos como los malditos del colegio!

5. El invisible.

Tal vez este tipo de maestro no lo recuerdes muy bien y la sencilla razón del porque tu mente no tiene ningún recuerdo es porque nadie le hacía caso y todo el mundo lo ignoraba.

El pobre siempre intentaba poner orden pero nunca lo lograba, ya que no podía marcar límites y no imponía su autoridad en el salón de clases, por lo que estoy seguro que en más de una ocasión intento hacerse el rudo y castigarte a ti y a tus compañeros, pero nunca lo tomaron en serio.

6. El Barco.

Se dividen en dos: Los que están conscientes de que son barcos y los que no se dan cuenta de que lo son.

Siempre te daban miles de chances y opciones para que entregaras tus tareas o proyectos y por lo regular eran muy relejados y tranquilos. ¡Se dice que! Tienen corazón de pollo, y por eso no dejan o dejaban tareas difíciles o complicadas.  

7. El buena onda.

¡Existe una diferencia muy grande entre ser barco y buena onda!

Este tipo de profesor se distingue por su capacidad de motivar y emocionar a los alumnos siempre busca la manera de apoyar a sus pupilos dentro y fuera de la institución, es divertido y buena onda por naturaleza.

 ¡Todo mundo quiere que les de clase!

8. El sabio.

Estoy seguro que alguna de tus clases se quedó grabada en tu memoria y estoy aún más seguro que fue con este tipo de maestro.
Se caracterizan por dar cátedras en el salón de clases y para este tipo de profesores no existe pregunta sin respuesta, pues siempre tenían argumentos correctos y muy completos.

¡Las horas de clase pasaban súper rápido con el sabio!

Hoy, agradecemos a todos los profesores que se han entregado al máximo en su profesión, gracias por entregar su juventud y su pasión, pero sobre todo gracias por compartir sus conocimientos con nuestros niños, jóvenes y adultos de nuestro país.  

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