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Las emociones son reacciones que tenemos frente a estímulos externos y también internos. Así pueden hacernos cambiar nuestro ánimo de forma agradable o desagradable.
Emociones como alegría, sorpresa, gratitud, serenidad, inspiración, son positivas. Pero, también las hay negativas como tristeza, miedo, ira, ambos lados son muy importantes y cada una sirve para distintos propósitos.
Es muy sano tener un equilibrio entre ambos polos, ya que cada emoción nos ayuda a mejorar aspectos para estar más plenos y felices.
Te damos una guía de algunas emociones y cuál es su función:
Alegría
Es una motivación para continuar en ese estado, además es un motor para concluír proyectos, para demostrar afecto o para sentirte seguro en algún sitio, una sensación de bienestar.
Gratitud
Te ayuda a apreciar a otras personas y a ser más empático y colaborativo, lo que también genera una sensación de bienestar y de compañía, evita el sentimiento de soledad.
Curiosidad
Es una emoción que tiene un fuerte poder motivante, ya que te ayuda a aprender y a explorar, lo que genera experiencia para que en futuras ocasiones sepas cómo resolver lo que se te presente.
Sorpresa
Es otro motivante, ya que hace que pongas atención a algo inesperado, sacándote de rutina y haciéndote ver algo que quizá no habías visto, ya sea para aprender de él, para agradecer o para sentirte confiado y seguro.
Esperanza
Es una de las mejores emociones, ya que se genera bajo una situación difícil, es un motivante que te hace accionar frente a dicha situación de forma positiva, logrando superarla de forma armoniosa.
Amor
Se dice que es la mejor de las emociones positivas, ya que abarca la mayoría de las anteriores, además tiene reacciones biológicas y químicas en tu cuerpo que te hacen mejorar tu calidad de vida.
Tristeza
Aunque pareciera una emoción muy negativa, en realidad sirve para pedir ayuda y apoyo a los demás, sobre todo cuando estamos saturados ante alguna situación o no sabemos cómo resolverla.
Miedo
Esta emoción ayuda a tu cuerpo a actuar ante consecuencias negativas para prevenir el peligro, no es una emoción mala si actúas y la superas, te ayuda a protegerte, pero demasiado miedo puede limitarte.
Ira
Es otra de las emociones más comunes, tenerla es te ayuda a luchar ante una injusticia, contra algún error o a poner límites asertivamente. Mal controlada puede causarte problemas.
Repulsión
Es otra emoción que te ayuda a marcar límites, ya que te motiva a mostrar que no puedes aceptar algo. Decir “no” ante lo que no te gusta, evita que acumules frustración y tristeza.
¿Cómo te sientes hoy? No evites cualquier emoción, cada una tiene un propósito diferente y aceptarlo y saber encausarlo te hará una mejor persona.