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GIUSEPPE TARTINI Y SU SONATA “EL TRINO DEL DIABLO”

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Angel Ponce
Angel Ponce
Licenciado en Ciencias de la Comunicación, entusiasta, cinéfilo, amante del rap mexicano y fiel aficionado al fútbol nacional e internacional, fotógrafo amateur de conciertos y entrevistador de talentos emergentes, así como de estrellas consolidadas.

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La música siempre ha tenido una conexión sobrenatural, pues en múltiples ocasiones hemos escuchado innumerables relatos de músicos que han vendido su alma a cambio de fama y fortuna. 

Tartini pasó a la historia por sus inusuales e impactantes declaraciones, pues en ellas aseguraba que había hecho un pacto con el mismísimo diablo. 
Giuseppe fue un compositor y violinista que nació en una provincia de Venecia un 8 de abril de 1692. En su juventud tuvo que huir de su ciudad al convento de San Francisco en Asis, debido a los celos que le tenia un cardenal por sostener una relación con una joven de su ciudad.

(Plaza de Tartini en Piran, Eslovenia)
En este lugar el joven Tartini comenzó a pulir sus habilidades y con el paso de los años logró ser uno de los mejores violinistas de la época al grado de que 1721 fue nombrado maestro de la capilla. 
El italiano en ese tiempo era muy famoso por ser uno de los violinistas más exigentes y técnicos de la época, pues su compromiso y dedicación no tenia limites practicaba día y  noche para mejorar. 

Después de un tiempo el músico escribió un relato escalofriante:

Una noche, en el año 1713 soñé que había hecho un pacto con el diablo a cambio de mi alma. Todo salió como yo deseaba: mi nuevo sirviente anticipó todos mis deseos. Entre otras cosas, le di mi violín para ver si podía tocar. ¡Cuán grande fue mi asombro al oír una sonata tan maravillosa y tan hermosa, interpretada con tanto arte e inteligencia, como nunca había pensado ni en mis más intrépidos sueños! Me sentí extasiado, transportado, encantado: mi respiración falló, y desperté. Inmediatamente tomé mi violín con el fin de retener, al menos una parte, la impresión de mi sueño. ¡En vano! La música que yo en ese momento compuse es sin duda la mejor que he escrito, y todavía la llamo el Trino del diablo, pero la diferencia entre ella y aquella que me conmovió es tan grande que habría destruido mi instrumento y habría dicho adiós a la música para siempre si hubiera tenido que vivir sin el goce que me ofrece.

Giuseppe Tartini, en Voyage d'un françois en Italie.

Según la leyenda el mítico instrumento de Tartini fue heredado a sus jóvenes aprendices hasta que en algún momento se le perdió la pista, se dice que el violín aún existe y esta rodando por el mundo y si este cae en manos de algún otro violinista el diablo se le aparecerá para ofrecerle un trato como lo hizo con su antiguo dueño. 

¿Qué dices te gustaría encontrar el violin de Tartini? 

 

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