Sin duda el séptimo arte siempre nos regala historias que nos pueden quedar como anillo al dedo y “Comer, rezar y amar” es una de esas películas que se quedan en tu vida.
¿Te ha pasado? Que las cosas de repente van mal y necesitas cambiar tu vida, emprender el viaje hacia un gran cambio, pero necesitas ese empujoncito, te entiendo y el personaje de Julia Roberts, Liz Gilbert, también.
Desde la primera escena “Comer, rezar y amar” te atrapa, pues la trama de la cinta tiene que ver con la vida de una chica neoyorquina que vive en la “perfección”, bueno eso creía hasta que se da cuenta que realmente esta confundida y perdida, esto la lleva a buscar lo que realmente necesita para ser feliz: paz interior y amor propio.
Este filme de humor irónico y una buena producción se convierte en una guía fácil de seguir y digerir, te aseguro que veras el universo de forma diferente, porque lo mejor es dejarse llevar por los detalles, la intuición y el amor a uno mismo para tener paz, ¿no crees? Si no has visto esta maravilla, ¿qué estás esperando? Puedes hacerlo en Netflix.
Después de verla te aseguro que te quedarás con frases favoritas como:
“El equilibrio es no dejar que nadie te quiera menos de lo que te quieres tú”
“Tienes que aprender a elegir tus pensamientos tal como escoges la ropa cada día”
“Nos conformamos con vivir infelices porque nos da miedo el cambio y que todo quede reducido a ruinas”
“Sonríe con tu cara, con tu mente y hasta con el hígado”
“Quédate aquí hasta que puedas perdonarte y todo lo demás tomará su rumbo”
“La única forma de sanar es confiando; un corazón roto significa que has intentado algo”
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