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Rejuvenece tu rostro con yoga facial

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El yoga facial puede ayudarte a reducir arrugas e imperfecciones en tu rostro, aquí te compartimos de qué se trata y cómo practicarlo.

Las arrugas e imperfecciones en tu piel son el reflejo de tu estilo de vida, pueden ser resultado de una mala alimentación, estrés, ansiedad, preocupaciones y alguna que otra emoción que provoca esas arruguitas que tanto odias.

Cambiar de hábitos te ayudará muchísimo para mejorar la apariencia de tu rostro y puedes complementarlo con algunas técnicas como el yoga facial, que te ayudará a liberar emociones y también a renovar la vitalidad de tu piel.

Qué es el yoga facial

Son una serie de ejercicios para activar diferentes músculos de tu rostro, lo que ayudará a que estén tonificados y evites la flacidez.

Recuerda que cuando el músculo tiene mejor tono, soporta mejor la piel, pero esta técnica también te ayudará a calmar la mente porque incluye momentos de meditación y relajación.

Los músculos de la cara los solemos mover de forma involuntaria y son el resultado de las emociones que vivimos a diario. Pero, podemos entrenarlos para moverlos y tonificarlos, esto es el yoga facial.

Te compartimos algunos ejercicios:

Ejercicio 1: Llena de aire tus mejillas y pasa ese aire de un a mejilla a otra con cinco repeticiones o hasta quedar sin aire, repite el ejercicio cuatro veces.

Este ejercicio te ayudará a liberar tensión, sobre todo acumulada en la mandíbula por estrés.

Ejercicio 2: Sonríe al elevar las comisuras de los labios hacia arriba, pero con una mirada neutral, relájate por algunos minutos, esto te ayudará a relajar tu rostro y a gesticular mucho menos.

Ejercicio 3: Abre la boca imitando a un títere y repite el sonido “aaaaaaa”, realiza este ejercicio cinco veces más. Esto te ayudará también a relajarte.

Ejercicio 4: Jala el labio inferior y apóyalo sobre el labio superior y sonríe. Sube la barbilla hasta que sientas como jala tu cuello. Retén esta postura por 10 segundos y repite. Esto te ayudará a fortalecer tus mejillas y cuello.

Ejercicio 5: Inhala profundo. Ahora, haz un puño con las manos y aprieta todos los músculos faciales al mismo tiempo. Exhala mientras abres la boca y sacas la lengua; mueve los ojos hacia arriba y abre las manos. Repite tres veces. Con este ejercicio, estimulas el tracto digestivo y estimulas la circulación sanguínea.

Ejercicio 6: Inclina tu cabeza hacia atrás y mira el techo, relaja tus músculos, traga saliva y presiona la punta de la lengua en el tope del paladar superior. Gira la cabeza ligeramente hacia la derecha y traga saliva. Repite tres o cuatro veces. Esto te ayudará a fortalecer cuello y mandíbula.

Ejercicio 7: Sonríe y eleva las comisuras de los labios hacia arriba, relájate por algunos minutos. Este ejercicio te ayudará a fortalecer los labios.

Ejercicio 8: Abre los ojos como si te hubieran sorprendido, procura no arrugar la frente. Mira en un punto fijo por diez segundos y repite cinco veces. Te ayudará a ejercitar frente y ojos, además es ideal si pasas mucho tiempo frente a la computadora.

En este link te compartimos más ejercicios.

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Foto: rubchikovaa / Depositphotos.com
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